The Emotions Lab explica como ciertos componentes tóxicos de los cosméticos afectan nuestra piel
Piel fatigada, deshidratada o apagada…¿Qué nos está contando? Por todos es sabido que la piel es el órgano más grande que tenemos en nuestro cuerpo. Ahora bien: ¿lo cuidamos cómo debe ser? Lo cierto es que la ingesta de toxinas a través de los poros de nuestra piel es constante.
Cremas, sérums, tónicos, lociones corporales… Nuestro día a día está repleto de acciones automáticas y a las que no prestamos suficiente atención: ni por aquello que aplicamos ni por cómo lo hacemos.
Según estudios científicos, existen más de 12.000 ingredientes, de los cuales se ha aceptado su uso en los productos cosméticos, siendo algunos de ellos compuestos tóxicos. Pero el dato más relevante: en la industria de EUA menos de un 20% de estos han sido analizados.
La mayoría de los componentes tóxicos de los cosméticos entran, a través de la piel, en nuestro torrente sanguíneo llegando a acumularse en nuestro organismo. Y entonces, ¿qué? Si nuestro cuerpo no consigue deshacerse de esas toxinas podemos llegar a lo que conocemos como toxicidad celular y a desarrollar diferentes afecciones cutáneas.
La Cosmética Emocional® de The Emotions Lab® revierte este concepto y los rituales beauty poniendo el foco, precisamente, en el qué y el cómo. “Piel sana, piel feliz”, es la máxima de The Emotions Lab® con una doble vertiente: salud para la piel y salud para el medio ambiente.
Y es que las toxinas que se ingieren por la piel a través de los productos cosméticos no solamente tienen una repercusión clara y directa sobre nuestro organismo sino que el medio ambiente también se ve perjudicado. Cada fase del ciclo de vida de un cosmético va a afectar directamente en la sostenibilidad de nuestro planeta.
The Emotions Lab® irrumpió en el sector de la Cosmética Emocional® con un concepto totalmente innovador y también con un savoir faire responsable con el ciclo de la vida; tanto de la naturaleza como de las personas.
Sus formulaciones están elaboradas con bases totalmente orgánicas, aceites de primera prensada en frío, aguas florales armonizadas y certificados BIO en sus materias primas.
Lujo, artesanía y sostenibilidad son las tres máximas de su Cosmética Emocional® que se ven reflejadas en toda la cadena de producción: Lotes de edición limitada realizados con productores locales, productos envasados a mano y zero waste.
Todo ello hace de The Emotions Lab® una marca comprometida con sus valores y filosofía de vida.
Cuidan del planeta, cuidan de tu piel.